Una de las excursiones que no te puedes perder. Si te gusta la aventura, los lugares paradisíacos y solitarios, los acantilados y sobre todo el mar, esta es una de las visitas obligadas durante tu estancia en Manuela Sea Villa.
La Ruta de los Chorros está ubicada en la última cala de la playa de los Caños de Meca en el término municipal de Barbate. Justo debajo de los acantilados del parque natural de la Breña, una de los lugares más bonitos de la provincia de Cádiz. La ruta comienza cuando acaba la carretera que cruza Los Caños, en la zona conocida como Los Castillejos, a partir de ahí el camino continua bajo pinares y acantilados.
No te olvides aparcar en uno de sus aparcamientos de temporada. Podrás dejar el coche hasta las 22 h. por unos 4 ó 5€ todo el día. Y cuando termines la excursión, al salir de la playa disfrutar de un mojito en la zona conocida como la Jaima.
Pero empecemos por la excursión, la ruta nos llevará aproximadamente una hora y media por trayecto, así que se ha de ir con tiempo. Al llegar a la playa verás que se práctica el nudismo, aunque cada vez menos, fundamentalmente por el gran número de visitantes de la zona en verano. Hace años esta era una zona muy frecuentada por hippies, y aunque todavía encontrarás algunos, cada vez son menos.
Dependiendo de como haya sido la temporada de invierno y los efectos de los temporales y la cantidad de arena originada por los ciclos del mar, puede ser una excursión complicada, quizás con cierto riesgo, por el peligro de desprendimientos, pero asumible.
Cuando termina la playa y comienza el camino rocoso, podrás disfrutar de las vistas de grandes bloques de piedra. Si miras hacia arriba pensarás que algún momento se puedan caer, pero no debes tener miedo, camina lo más próximo al mar. También observarás un sin fin de gaviotas que inundan el cielo del lugar.
Cuando llegues a la ruta de los Chorros verás que la excursión ha merecido la pena, por su belleza paisajista, los restos fósiles y la cascada de agua dulce en la que te podrás casi sumergir en una ducha natural. Si te atreves, tienes dos bonitas cuevas para visitar, y si te arriesgas un poco más, podrás llegar a la Cala Verde, un entorno natural para el disfrute de los más atrevidos, pero esto no os lo cuento, tiene que descubrirse por uno mismo.
Es importante ir provistos de calzado adecuado. Y solo se debe hacer la excursión cuando la marea está baja, y hay que tener en cuenta los horarios y coeficiente de las mareas para que no nos coja desprevenidos.
Seguro que querrás repetir, es una de las mejores excursiones de la zona y por ahora no muy concurrida. Disfrutarás de ella.